Me he encontrado con esta pregunta, formulada de distintas maneras, en muchas ocasiones.
Supongamos que alguien se ha decidido a adoptar un gato, que ese alguien es una persona responsable y fiable. Una vez tomada la decisión se da cuenta de que no conoce a nadie que le pueda asesorar sobre cómo proceder a continuación. ¿Qué hacer?
Mi primer consejo es buscar en primer lugar a algún amigo o conocido que se sepa que tiene vinculación o interés con la protección animal. Siempre suele haber alguien: un compañero de trabajo, un amigo de un amigo… y pedir sin miedo la recomendación de alguna buena protectora. Se puede buscar por Internet protectoras o asociaciones aglutinadoras de protectoras y contactar con ellas pidiendo recomendación sobre el lugar al que acudir. Siempre es preferible que la primera experiencia adoptando sea en un lugar que funcione bien, que tengan sus animales en buenas condiciones y conozcan bien su comportamiento y carácter.
Y precisamente comportamiento y carácter es lo que hay que pedir en primer lugar cuando se vaya allí, haciendo las mínimas peticiones posibles sobre aspecto. No quiere decir que no podamos mostrar preferencias. Por poneros un ejemplo, yo cuando fui allí buscaba un perro mediano de pelo corto. No hay problema. Pero no cerréis puertas a priori, por ejemplo, a perros grandes por creer que no son aptos para pisos pequeños (es su necesidad de actividad y no su tamaño lo que importa en ese sentido.
Es mil veces preferible en un perro, igual que en las personas, buscar cómo son por dentro y no por fuera. El perro más bonito del mundo en la foto, si tiene problemas de comportamiento o si simplemente por carácter no encaja contigo, acabará pareciéndote el más feo del mundo. El perro más feo en una foto, tal vez en directo tenga contigo una química arrebatadora.
Y sí, hablo del directo y de la química. Igual que nos sucede con la gente, con los animales también existe eso intangible que nos hace sentir mayor o menor afinidad.
El día que tenga que volver a adoptar iré a una protectora de confianza en la que conozcan muy bien a sus perros. La primera vez fue PROA, la segunda ANAA. No sé cuál será la tercera vez, tal vez El buen amigo, tal vez La voz animal, puede que Cuencanimal. ¡Quién sabe! Hay tantas… La petición volverá a ser la misma: que tenga buen carácter, se lleve bien con niños, perros, perras y gatos. Y entre los pocos o muchos animales que me presenten dejaré que la química me diga qué animal se vendrá conmigo a casa.
Hacerlo así es garantía de éxito.
La belleza de braco que hay en las imágenes se llama Polo y tiene unos tres años. Me cuentan que no solo es espectacular por fuera, sino también por dentro: es cariñoso, dulce, sumiso, obediente, dócil. Ideal para cualquier familia. Su acogida termina el día 12 de mayo, si no encuentran antes tendrá que ir a una jaula en residencia.
Esta en Valencia, difundido por Adopta, salva una vida, pero puede viajar a otras provincias
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